¿Como la sequía de un rio en China puede poner en jaque la economia global?
El Yangtsé (en chino tradicional, 長江; en chino simplificado, 长江; pinyin, Cháng Jiāng; literalmente, ‘río largo’; en tibetano, Bri-chu) es el más largo de China y del continente asiático— que fluye en direcciones SE y E a través de ocho provincias —Anhui, Hubei, Hunan, Jiangsu, Jiangxi, Qinghai, Sichuan y Yunnan—, las municipalidades de Chongqing y Shanghái, y la región autónoma del Tíbet, hasta desaguar en el mar de la China Oriental, cerca de Shanghái. Tiene una longitud de 6300 km, el tercero más largo del mundo, tras el Amazonas y el Nilo.
Sumado a eso, provee recursos para un tercio de la población y es crucial para la economía y la cadena de suministros global.
En este verano boreal está en niveles alarmantemente bajos a causa de una sequía y una ola de calor sin precedentes. Las consecuencias se sienten en varias provincias, donde los habitantes sufren apagones eléctricos y varias fabricas han tenido que reducir y detener su producción.
China emitió su primera alerta nacional de sequía del año la semana pasada después de que regiones clave como Shanghái y Sichuan experimentaran semanas de temperaturas extremas.
La ola de calor ya dura dos meses y es la más larga desde que hay registros en el gigante asiático, de acuerdo al Centro Nacional del Clima.
Una situación que no solo dificulta la dinamización de la economía china, sino que también aumenta la presión sobre la economía global, afectada por la sequía y altas temperaturas en varios continentes, los disparados precios de la energía y el aumento del costo de vida tras la pandemia y los efectos de la guerra en Ucrania.